Thursday 28 June 2012

Numeralia del SuperDomingo

  • A partir de este momento, faltan poco más de 72 horas para el inicio de la jornada electoral más esperada de los últimos 6 años.
  • El día domingo 1 de julio, casi 85 millones de mexicanos se deberían dar cita en las urnas establecidas a lo largo y ancho del país para participar en la jornada más importante del Proceso Electoral Federal 2011-2012.
  • En dicha jornada, los mexicanos elegiremos al próximo Presidente de la República, quién dará inicio a su administración el 1 de diciembre de 2012 y la cuál habrá de durar los consabidos casi 6 años, para concluirla el 30 de noviembre de 2018.
  • Además de Presidente, los mexicanos elegiremos a 128 Senadores y 500 Diputados Federales, quienes habrán de ocupar dicho cargo por los próximos 6 y 3 años respectivamente, contados a partir del 1 de septiembre de 2012.
  • Asimismo, en 15 estados de la República y el Distrito Federal habrá elecciones estatales coincidentes,  dónde los ciudadanos elegirán a Presidentes Municipales o Jefe de Gobierno y Delegados, en el caso del Distrito Federal.
  • Además de los millones de mexicanos que participarán en esta elección ejerciendo su voto en territorio nacional, casi 60,000 mexicanos residentes en el extranjero participaremos en la elección de Presidente de la República. Esta es la 2a ocasión en que mexicanos residentes en el extranjero tenemos la oportunidad de participar en una elección federal.
  • Estas elecciones nos han salido caras. Tan sólo las actividades que los partidos políticos llevaron a acabo este 2012, nos costaron 5 mil millones de pesos. Dicha cantidad es sólo una parte de los más de 15 mil millones de pesos que el IFE recibirá tan sólo este año para sus actividades.
  • Esta cantidad también contempla el costo de los dos debates presidenciales organizados por el IFE, que nos costaron a los mexicanos, más de 4 millones de pesos... cada uno.
  • Aún así, se estima que sólo del 60% al 70% del electorado ejercerá su voto este SuperDomingo. Esto podría parecer una cifra muy alta, pero significa que sólo entre 50 y 58 millones de mexicanos llegarán a la próxima cita democrática.
  • Sin más ni más, se estima que 25 millones de ellos votarán por el candidato de la coalición Compromiso por México, Enrique Peña Nieto.
  • Lo que quiere decir que, cifras más, cifras menos, 1 de cada 3 mexicanos decidirá el futuro inmediato de nuestro país.
¿Aún crees que tu voto no cuenta?

¡Participa! ¡Ejerce tu voto este domingo 1 de julio! Vota por quién quieras, pero vota.

Saturday 23 June 2012

#YoSoy132, Tercer Debate y la democracia en México


El miércoles pasado, integrantes del movimiento #YoSoy132 organizaron un tercer debate entre los candidatos a la Presidencia de la República. El debate fue moderado y estructurado por los propios estudiantes, difundido por radio e Internet y seguido por prácticamente todos los medios informativos, periodistas y ciudadanos que muestran algún interés por el quehacer político nacional, actual y futuro.

El debate enfrentó muchos problemas y se desarrolló con dificultad.

En primer lugar, #YoSoy132 solicitó al Instituto Federal Electoral (IFE) organizar un tercer debate, además de transmitir el segundo a nivel nacional. Las propuestas fueron recibidas, procesadas y rechazadas con una prontitud administrativa que pocas veces se ve en México.

En segundo lugar, en dicho debate, sólo participaron tres de los cuatro contendientes, a saber, Andrés Manuel López Obrador, Josefina Vázquez Mota y Gabriel Quadri de la Torre, con la gran ausencia del candidato que hoy está mejor posicionado en las preferencias electorales (y por mucho, según la mayoría de las encuestas en México), Enrique Peña Nieto.

Finalmente, el debate mismo encontró numerosos obstáculos. Organizado por aspirantes a profesionales, con recursos materiales claramente insuficientes, y con un formato de discusión sumamente rudimentario, los estudiantes se vieron por momentos superados por la tarea que ellos mismos establecieron. Desde el inicio del debate hubo problemas de audio, video y sincronización que no permitían a la audiencia escuchar a cabalidad las ideas, propuestas y críticas de los candidatos presentes.

Y aún así, el debate fue un éxito.

Un éxito para #YoSoy132. Aunque siempre bienvenido en el ámbito político, un movimiento apartidista, crítico y pacífico como éste, pocas veces logra realizar una contribución tangible y positiva más allá de las ocasionales manifestaciones políticas. Sin embargo, con la organización de este ejercicio, #YoSoy132 probó su valía como movimiento, su importancia como actor y su contribución como constructor de espacios de discusión sobre las ideas y proyectos que definirán el rumbo y futuro inmediato de nuestro país.

Un éxito para los ciudadanos. En un país dónde pocos, muy pocos, están acostumbrados a ver y escuchar a "sus" candidatos presentar y contrastar sus ideas, además de criticar las de sus adversarios de forma directa e inmediata, el debate logró reunir a tres de las cuatro personas que compiten al cargo público más importante de nuestro país. No, Enrique Peña Nieto, candidato por los partidos Revolucionario Institucional y Verde Ecologista de México (a veces, él mismo olvida que representa a dos partidos), y favorito en la mayoría de las encuestas no tomó parte del debate. Aunque Peña Nieto adujo que su ausencia se debió a que el debate no garantizaba neutralidad ni equidad en su participación, en realidad, lo que más preocupaba al candidato era participar en un debate organizado por un movimiento que él considera en contra de su proyecto y su persona. Pero la ausencia misma de Peña Nieto de un ejercicio en el que el resto de los candidatos presidenciales sí participó, podría dar pie a preguntas y reflexiones que podrían cambiar la intención de voto de algunos. Al menos de aquellos que no votan sólo por colores, "tradiciones familiares" o prebendas.

Y lo más importante de todo, el debate organizado por #YoSoy132 fue un éxito para la democracia en México

Que jóvenes ciudadanos hayan logrado que los candidatos presidenciales accedieran a reunirse para debatir en un evento no organizado ni respaldado por la autoridad electoral, es un enorme logro. Si bien estos ejercicios son comunes en otros países, en México este tipo de encuentros son una verdadera rareza. Este tipo de ejercicios nos acerca un poco más a lo que son las prácticas comunes en las democracias consolidadas.

Que los candidatos presidenciales hayan tomado en serio esta propuesta significa un gran logro para un país en el que los políticos no están acostumbrados a escuchar a los ciudadanos, a quiénes simplemente ven como electores cuya simpatía deben ganar cada tres o seis años. Este tipo de ejercicios incentiva a los políticos y prospecto de políticos a comenzar a escuchar y no sólo a hablar.

Que los ciudadanos --o al menos un número importante de ellos-- haya seguido, visto y escuchado el debate significa que, cada vez más, los mexicanos nos transformamos en una sociedad crítica, informada, ávida de escuchar y discutir ideas, presta a respaldar aquellas que contribuirán al desarrollo de nuestro país y el fortalecimiento de nuestra democracia, y a criticar aquellas que no lo harán.

Sin duda alguna, el debate de #YoSoy132 fue un éxito para todos: el movimiento mismo y los ciudadanos que lo vieron y escucharon. Pero más importante, es un éxito para un país como el nuestro que tan urgentemente requiere de una activa y sólida democracia.

Monday 11 June 2012

Un logro más de Espinosa Cantellano: México, Brasil y las "cartas de invitación" a España

Por años he criticado el nada ilustre papel que realiza nuestra nada capaz Secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa Cantellano, designada a tal puesto sólo en base a su gran amistad con la esposa del Presidente Felipe Calderón, Margarita Zavala. El día de hoy he decidido continuar con esta labor de crítica y denuncia a través de la cápsula semanal "Un logro más de Espinosa Cantellano", dónde comentaré los inexistentes logros y preocupantes retrocesos de la política exterior mexicana a cargo de tan incapaz, tibia y contradictoria canciller. Así que para comenzar estas cápsulas:

Un logro más de Espinosa Cantellano: México, Brasil y las "cartas de invitación" a España

Después de que aproximadamente 800 turistas mexicanos fueran rechazados en aeropuertos españoles, especialmente Madrid y Barcelona, para su ingreso al territorio de aquél país, México expresó su preocupación por el número de inadmisiones al Gobierno de España.

En suma, México declaró que este número no refleja las buenas relaciones diplomáticas y comerciales entre los dos países. Nuevamente, esto se da varios meses después de que los mexicanos que desean viajar a aquél país tuviésen que añadir a sus documentos de viaje, una carta de invitación, dónde se establece específicamente que un ciudadano español invita a los mexicanos en cuestión a pasar un tiempo en tierras ibéricas.

Ya otros países habrían pasado en años anteriores por la misma situación, siendo uno de estos Brasil. El gobierno de España aduce que la petición de una carta de invitación a ciudadanos brasileños responde al creciente número de inmigrantes brasileños que llegan al país como turistas, para establecerse e incorporarse al mercado laboral español de forma irregular.

Brasil respondió a esta situación contundentemente. Tal y como lo hizo España, Brasil estableció que los turistas brasileños que se hospeden en una residencia particular deben mostrar una carta de invitación, informando la dirección y plazo de la estadía, además de un comprobante de medios económicos suficientes para su manutención mientras permanecen en Brasil. Es probable que ninguno de estos requisitos sea "suavizado" (es decir, eliminado) por el Gobierno de Brasil, hasta que España no haga lo propio con los turistas brasileños.

Estando ante una problemática similar, la mayoría de nosotros esperaría una respuesta del Gobierno de México tan contundente como la que dio Brasil ¿no es así? La palabra "reciprocidad", muy usada en el lenguaje diplomático, sugeriría una respuesta correspondiente. Al menos, eso podría pensarse.

Sin embargo, nuestra nada ilustre Secretaria de Relaciones Exteriores, cerró dicha posibilidad. A decir de ella, México no establecerá una carta de invitación a nuestro país a ciudadanos españoles, porque va en contra de la política turística del país. Así, sin más.

No importa que mexicanos sean rechazados en aeropuertos españoles de manera arbitraria. No importa que mexicanos vean sus planes de viaje frustrados y su dinero desperdiciado si es que su admisión a España es rechazada por obscuras razones. No importa que México reciba más turistas de países que no piden visas o cartas de invitación a mexicanos, tal y como es el Reino Unido, que de España. No importa que otros países actuen con firmeza imponiendo los mismos requisitos a españoles, que los que los españoles piden a extranjeros "no comunitarios".

Nada de eso importa. Lo que importa es seguir abriendo la puerta a los visitantes de España. Ellos no abren su puerta a los nuestros. Tampoco generan tantos ingresos como los turistas de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, países que no piden carta de invitación a mexicanos. ¡¿Pero qué importa?! La situación de nuestros connacionales en tierras más allá de nuestras fronteras no es cuestión de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Eso déjenselo a la Secretaría de Turismo. Y es que a decir de las declaraciones de Espinosa Cantellano, las dos Secretarías ya intercambiaron responsabilidades.


Lee más:

México rechaza establecer "carta de invitación para extranjeros"
"Reescribe" España carta de invitación a turistas mexicanos
México no establecerá medidas migratorias como España: Espinosa

Sunday 3 June 2012

Un jarabe extranjero para una enfermedad nacional

Hoy por hoy, la política y acciones que los Estados Unidos de América ejercen y emprenden hacia y en países extranjeros son probablemente las más repudiadas del mundo. Basta mencionar los nombres Guantánamo, Afganistán, Irak --¿cómo olvidar Abu Ghraib?--, para que cualquier posible argumento en favor del intervencionismo estadounidense comience a resquebrajarse. Y probablemente no haya país que conozca mejor del no tan sutil intervencionismo estadounidense que México. La tan conocida cita: "¡Pobre México! Tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos" resume a la perfección la difícil relación que México tiene con su poderoso vecino del norte.

Dicho esto, hoy por hoy, me congratulo de que Estados Unidos por fin esté interviniendo en los asuntos domésticos de nuestro país... para bien.

Desde hace un par de años, el Departamento de Justicia de Estados Unidos y al menos otras dos agencias del gobierno federal estadounidense llevan a cabo una investigación contra Tomás Yarrington Ruvalcaba, quien fuera Gobernador del Estado de Tamaulipas de 1999 a 2004, por presunto lavado de dinero proveniente de cárteles mexicanos de la droga y que resultó, entre probablemente otras cosas, en la compra de propiedades en el sur del Estado de Texas, en Estados Unidos. Las indagatorias señalan que Yarrington habría adquirido dichas propiedades con dinero de sobornos de cárteles mexicanos del narcotráfico que recibió cuando fuera Gobernador, probablemente a cambio de libre tránsito por Tamaulipas de la droga que llega a territorio estadounidense.

Aunque la investigación no ha derivado en el establecimiento formal de cargos criminales contra Yarrington, que pudieran resultar en su posible extradición a los Estados Unidos de América, los mexicanos no podemos sino destacar (¿y agradecer?) las acciones que el gobierno estadounidense está llevando a cabo. En un país dónde gobernadores, senadores, diputados y demás "representantes populares" y otros funcionarios públicos diariamente son cómplices y ejecutores de actos ilegales como malversación de fondos, enriquecimiento ilícito, protección de actividades ilícitas, etc., que son realizados con toda impunidad, no podemos dejar de alegrarnos que, de una vez por todas, un gobierno haga por fin frente a estos criminales y los lleve ante la justicia. Lo que debería indignarnos es que ese gobierno no sea el nuestro.

Que el gobierno de Estados Unidos investigue y, posiblemente, persiga a un mexicano no causa sorpresa. Los estadounidenses han perseguido a "criminales" mexicanos desde los tiempos de Pancho Villa (si no es que desde mucho antes), varias veces sin mucho éxito. Asimismo, cada año un gran número mexicanos son procesados en los Estados Unidos por acciones que probablemente en otros países no constituirían un delito, tales como la simple búsqueda de una vida mejor.

Pero nadie con un ápice de sensatez podría apiadarse o simpatizar con Tomás Yarrington. Hoy por hoy, Tamaulipas es uno de los estados más inseguros del país. Dominado por cárteles del narcotráfico, con poblaciones enteras que han desaparecido a raíz de la ola de terror generada por las desapariciones, balaceras y secuestros que nadie esclarece y mucho menos detiene, el estado ha sido declarado por su propio Congreso como "más inseguro que nunca" (sic). Baste mencionar el nombre San Fernando, para recordar las tragedias y horrores que hoy constituyen la vida pública tamaulipeca.

Ciertamente, la corrupción en que estuviera inmiscuido Tomás Yarrington es sólo una de las variables que explican la crisis por la que atraviesa Tamaulipas y el resto del país. Yarrington es sólo uno de nuestros cientos de miles de "servidores públicos", que día a día se sirven del sufrimiento de otros mexicanos para asegurarse un estilo de vida que de una forma honesta nunca podrían alcanzar. La corrupción de Yarrington ha lastimado no sólo a los tamaulipecos sino a todo el pueblo de México. No podemos sino alegrarnos de que finalmente un gobierno esté dispuesto a investigar y probablemente perseguir sus crímenes, así como los de sus secuaces.

No debería preocuparnos entonces que ese gobierno no sea el nuestro. Lo que debería preocuparnos e indignarnos es que ese gobierno nunca sea el nuestro.